Banorte ha iniciado el proceso de certificación de sus propios modelos internos de reservas y capital por parte de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV). Para ello, cuenta ya con una infraestructura analítica controlada que permite el desarrollo, la ejecución y el seguimiento de los mismos, de acuerdo con los requerimientos regulatorios.
De cara a los retos planteados por el programa 20–20, Banorte está rediseñado su proceso de aprobación de crédito masivo, tanto consumo como Pymes, con el fin de afinar su evaluación de riesgos y, al mismo tiempo, dotar al sistema de funcionalidades que permitan dar una respuesta ágil y personalizada al cliente. El rediseño incluye la venta multiproducto, a través de un simulador, donde el cliente podrá configurar su paquete de productos, el crecimiento de su base para campañas de venta cruzada y un esquema de tasas personalizadas, entre otras ventajas.
Banorte ha fortalecido su motor de cálculo de indicadores de riesgo de su cartera, lo cual le permitirá una segmentación más fina de sus clientes, el cálculo de tasas de interés personalizadas y el diseño de estrategias basadas en una mejor combinación riesgo-rentabilidad.
Dentro de las mejoras a la infraestructura de control del Banco, Banorte pondrá en breve en operación el nuevo sistema de administración de líneas y límites internos y regulatorios. El sistema dará información sobre la exposición completa del cliente para fines de revisión periódica, aprobación de nuevas líneas y seguimiento en línea de todas las disposiciones de la Banca Mayorista.